Maridaje de octubre. Porque acompañado sabe mejor.
Ahora que ya tenéis la caja de Octubre delante ya estaréis planeando cómo os la beberéis. ¿Habéis decidido ya un menú? Si no es así nosotros os ayudamos a escoger es plato que le sentará maravillosamente a cada cerveza.
Shumensko
Una cerveza búlgara de las familias de las lager para aquellos momentos en que no queremos excesos y en los que solo nos apetece disfrutar de una lager clásica, sin estridencias pero bien hecha.
Esta cerveza dorada, sin demasiado carbónico, tiene un marcado sabor a malta tostada y a lúpulo. Además, como curiosidad, si se deja reposar unos pocos minutos desarrolla ciertas notas ahumadas que recuerdan al salami.
Su cuerpo ligero y mediana intensidad la hacen ideal para aperitivos ligeros y suaves. Lo mejor que podéis hacer es preparar una cena de aperitivo con salsa humus, tzatziki y otras salsas para mojar. Acompañadlo además con langostinos cocidos, quesos suaves y frescos y embutidos ligeros como serian el jamón york, el fuet o similares.
En cambio, si no os apetece picar y preferís un plato más contundente os recomendamos que la acompañéis con un plato de pollo al horno al limón, con patatas y cebolla también al horno. Estos sabores suaves y harmoniosos serán los mejores compañeros para una lager sencilla pero sin complejos.
¿Con esta cena y esta cerveza quien puede fallar?
St. Benoît Brune
Esta es una cerveza trapense, con todas y cada una de sus cualidades más alabadas en este estilo. Una increíble y densa espuma de color lecha manchada se combina con el color oscuro y rojizo de la cerveza.
Esta cerveza desprende de inicio una gran cantidad de olores frutales y cítricos, dejando al final notas tostadas que redondean la experiencia de olerla. Con un cuerpo increíble y un carbónico muy fino y elegante, esta cerveza se presenta dulce en boca, dejando un gusto ácido mientras la probamos, para acabar con gustos tostados y amargos. Su sabor es sobretodo tostado, con grandes notas a caramelo y regaliz.
Esta cerveza acompaña a la perfección a cualquier guiso de carne potente o a platos de caza. Un guiso de ternera con patata y verdura será el mejor amante de esta cerveza si le dais la oportunidad.
Las carnes grasas y sabrosas como el cerdo, a la plancha o a la parrilla, también harán las delicias de los amantes de este tipo de cervezas.
Si por el contrario preferís convertir la experiencia en un momento especial, os aconsejamos acompañar esta cerveza con unas buenas trufas. Descubriréis que la pareja que forman la cerveza trapense y el chocolate es mucho mejor que la que pueden formar el cava y las fresas.
Zubr
Esta lager de color oro, brillante y muy limpia hará las delicias de los aficionados a este tipo de cerveza. Con un carbónico muy fino, regular y persistente esta cerveza polaca genera una buena capa de espuma blanca y densa, que aporta una sensación cremosa cuando la probamos.
En esta cerveza se aprecian gran cantidad de aromas tostados, entre los que destacan el cereal y el caramelo, con un leve toque floral y aromático al final
Esta cerveza es la compañera perfecta de un aperitivo clásico de domingo, sus toques amargos pero sin excesos, la hacen perfecta para iniciar una buena comida.
Su sabor suave la hace también perfecta para acompañar a pescados blancos a la plancha o al horno, acompañados de algún aliño suave.
Nuestra recomendación, un buen filete de merluza en salsa de yogur y endivias serán tu mejor elección.
Sea cual sea la opción que escojáis, acertareis seguro.
¡A disfrutar en buena compañía y Bon appetit!